¿Qué es madurar? - Marichoni

 

Decidir con honestidad lo que

 se dice y lo que no se dice,

¿Qué es madurar?

¿Una acción? ¿Un proceso? ¿Una meta?... intento responder:

Madurar para alcanzar mi verdadera humanidad, eso es lo primero que se me viene a la mente, y me vuelvo a preguntar ¿eso es madurar? Y me surgen respuestas: plenitud, desarrollo, conocimiento, certeza, toma de decisiones… Sigo sin convencerme y vuelvo a preguntarme ¿qué es madurar? hasta que encuentro una palabra más adecuada para lo que busco y encuentro: conciencia, darme cuenta, saber reconocer mi condición, mi posibilidad, mi realidad y responder a ella.

Con una nueva variante: Madurar ¿para qué? … Para saber elegir, para poder ejercer mi libertad, para reconocer a los otros en mi entorno. Madurar para estar con ellos, con los otros que son mis otros, los que han tocado mi vida y se han convertido en parte de mi mundo.

Un aspecto más que descubro al volver a hacerme la pregunta ¿qué es madurar? También es aprender a desapegarse, a dejar ir, a dejar volar, a abrir el espacio que el otro necesita sentir, a aceptar lo que ocurre como lo púnico real, a reconocer en lo que puedo incidir y lo que debo dejar, a darme cuenta de mi posibilidad y de lo que no puedo modificar. También eso es madurar.

Y al darme varias respuestas, me acerco más a la comprensión de la pregunta ¿qué es madurar? Ahora se me ocurre otra respuesta que puedo dar con mayor claridad: madurar es comprender que la acción se puede redefinir como el acto de servir.

Y así puedo terminar parafraseando a la Madre Teresa “El que no vive para servir, no sirve para vivir” y yo agregaría: Ocupa tu tiempo en servir porque es la misión del convivir.